La matanza de nuestros hermanos cristianos a manos del ISIS continúa ante la mirada hacia otro lado de la comunidad internacional.
Anoche vi uno de esos vídeos atroces, sin censura, y comprobé como las víctimas eran los verdugos, no los asesinados. Aunque esto pueda parecer una locura, la cara de los 21 asesinados reflejaba una serenidad que solo Dios es capaz de otorgar a sus hijos con la certeza de que el cielo le estás esperando. Ni una cripación, ni un reproche, ni un asomo de miedo, en sus caras se podía ver la fuerza de los cristianos a los que Dios espera con las puertas abiertas de par en par a la santidad.
Ese ejemplo de nuestros 21 hermanos debe servirnos para luchar por ellos y para luchar por nuestra religión con la certeza de que Dios no quiere que se cometan estas atrocidades aunque sea capaz de dar fuerza a quién lo sufre y en su corazón guarde misericordia para los asesinos.
Creo que es el momento de dejar de mirar para otro lado viéndolo como un conflicto lejano y darnos cuenta de que son hermanos que están perdiendo su vida defendiendo su fe, Nuestro Dios y nuestra libertad.
Desde este blog, nos unimos a la repulsa a estos crímenes y al desinterés de la Comunidad Internacional y nos unimos a una oración por el alma de estos 21 cristianos ya camino de la Santidad y que ya están al lado de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Pido una oración por sus almas y que en nuestra Semana Santa les tengamos presentes, tanto cada uno de nosotros como cada una de las Hermandades. Algún acto de oración o recuerdo, sería más que necesario. NO LOS PODEMOS OLVIDAR.
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