Hola tía. Ya me estoy preparando para ir al cumple tuyo. En la tele estoy viendo a la Canina mientras papá termina de hacer sus deberes. He aprovechado que está distraído para poder felicitarte por aquí ya que prefiero que siga pensando que no sé escribir. No sabes cuánto disfruto cuando empiezan a ponerme sonrisitas o a que papá me enseñe el hola Don Pepito jajajaja. Si supiera que soy capaz de escribir a ordenador...
Mamá sí que sabe enseñarme cosas chulas pero como papá se ha quedado en el Pepito y en el José pues le animamos y ya está jejeje.
Bueno, que me lío.
En este blog papá celebra el cumpleaños de sus hermanos y yo hoy me he propuesto romper su costumbre y celebrar el cumpleaños de mi tía. Yo sé tía que cada vez que paso por tu casa digo tu nombre y cuando llaman al telefonillo o te nombro a ti o nombro a Jacob jejeje. Eso, supongo, querrá decir algo jejeje. Eres mi tía divertida, la de los animales y los colgantes que, si te digo la verdad, no sé para que sirven porque no tengo ninguno jajaja.
Gracias a ti estoy perdiendo el miedo a Caty y a los bichos y aprendiendo mucho. Guardo con mucho cariño el tebeo de Canina que me llevaste al hospital aunque sigo enfadado porque casi todas las pegatinas las pegó papá, ¿qué mérito tiene pegar pegatinas con 30 años?. Lo dicho antes, si es feliz...
Bueno tía, espero seguir creciendo y jugando contigo como hasta ahora y copio y pego lo que pone papá como deseo a todos sus hermanos "que nuestros titulares te guíen y protejan".
Un mua y un ohh.
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